Aumentan las provisiones que deben dotar las entidades financieras por los activos inmobiliarios
Las provisiones que deben dotar las entidadesfinancieras por sus activos inmobiliarios se han aumentando fuertemente tras la
última reunión celebrada por el Consejo de Ministros del pasado viernes,
situando a nuestro país entre los países de Europa más exigentes en esta
materia.
Las nuevas provisiones que deberán dotar las
entidades financieras por sus activos inmobiliarios serán las siguientes:
La cobertura con provisiones de sus suelos al
corriente de pago (que suman 25.000 millones de euros) pasa del 7 por 100 al 52
por 100.
La de las promociones en curso (16.000
millones de euros) del 7 por 100 al 29 por 100.
La de las viviendas terminadas (61.000 millones
de euros) pasa del 7 por 100 al 14 por 100.
La de aquellos créditos sin garantía real
(18.000 millones de euros) del 7 por 100 al 52 por 100.
Con respecto a este aumento de las
provisiones, señalar que aquellas entidades que tras este saneamiento presenten
déficit de recursos propios o de capital principal de acuerdo con la normativa
vigente tendrán que capitalizarse en el mercado o, en su defecto, podrán
solicitar al FROB, la suscripción de bonos convertibles contingentes
("cocos") o de capital para fortalecer su balance. En el caso de
acudir al FROB no se trata de ningún tipo de ayuda o subvención pública. Los
"cocos" pagarán al FROB un tipo de interés de mercado, que será,
aproximadamente, el doble del coste de la financiación del Tesoro al mismo
plazo (cinco años). Las entidades que recurran al FROB deberán presentar un
plan de reestructuración. Indicar además que las entidades financieras deberán
presentar ante el Banco de España sus planes para cumplir con las nuevas
exigencias antes del 11 de junio.
Por último señalar que la finalidad que se
persigue con la elevación de estas dotaciones inmobiliarias a la banca, es la
de situar al sector financiero en disposición de hacer frente a un hipotético
empeoramiento de la situación de su cartera inmobiliaria sin que se vea
afectada su solvencia. Es decir, se anticipan provisiones para una eventual
entrada en morosidad de estos créditos sanos, según las pruebas de estrés
realizadas.
Para más información:
Ministerio de Economía y Competitividad