Las mujeres gestionan mejor el dinero
Las mujeres gestionan mejor el dinero
Según una encuesta internacional que el Grupo ING realiza entre más de 11.000 personas de 11 países europeos
La mayoría de los españoles considera que las mujeres gestionan mejor el dinero
El 42% de los españoles declara tener conflictos con su pareja a la hora de gestionar el dinero
Asimismo el 46% de los españoles reconoce no haber recibido ningún tipo de educación financiera
El 18% de los encuestados europeos admiten dedicar más tiempo a comprar ropa que a buscar una buena cuenta de ahorros
La segunda oleada de la Encuesta Internacional de Hábitos Financieros1 de ING revela información relativa a la educación financiera de 11.000 consumidores de 11 países europeos. Según este estudio, el 52% de los españoles cree que las mujeres son quienes mejor gestionan el dinero. Se trata del porcentaje más alto entre los países estudiados. En todos los países es mayor el número de ciudadanos que cree que las mujeres gestionan mejor el dinero, frente a los que creen que son los hombres. Además, los españoles y los franceses son los europeos que menos confían en la gestión doméstica masculina, ya que sólo un 8% y un 9% respectivamente cree que son los hombres quienes mejor gestionan el dinero, mientras que en Turquía y Polonia este porcentaje asciende al 31% y 24%, respectivamente.
¿Quién gestiona mejor el dinero? Del estudio también se desprende que el 42% de los españoles tiene conflictos con su pareja en la gestión de la economía doméstica.
En este sentido, polacos y turcos son quienes más discrepan al respecto: el 69% de los polacos y el 58% de los turcos declara tener algún conflicto con su pareja en la gestión del dinero.
Por su parte, en caso de existir discordia, el 23% de los españoles declara no estar de acuerdo sobre cómo gastar el dinero o cuánto se debe ahorrar.
Se trata del principal desencuentro en todos los países estudiados.
Por otro lado, el estudio del Grupo ING recoge también información relacionada con el tiempo que los encuestados se toman a la hora de tomar decisiones. Así, el 18% de los europeos admiten dedicar más tiempo a comprar ropa o, en el caso de los españoles, a decidir sobre sus vacaciones (30 minutos de media), que en elegir una cuenta de ahorros (10 minutos de media) o una tarjeta de crédito (10 minutos de media). Sin embargo los españoles si dedican más tiempo en el caso de tomar una decisión sobre un préstamo hipotecario (110 minutos de media), un préstamo personal (50 minutos de media), una compañía de seguros (40 minutos de media).
Educación financiera
El 46% de los españoles no ha recibido nunca ningún tipo de educación financiera. Entre los que sí han recibido educación financiera, un 19% declara haber aprendido a través de información en Internet y medios de comunicación; un 8% se formaron leyendo libros; un 11% fueron enseñados por sus padres, amigos o familiares y sólo un 8% recibió formación financiera en el colegio.
Estos datos refuerzan el hecho de que casi el 90% de los europeos encuestados coincidan en que la educación financiera debería enseñarse en los colegios. Un 85% de los españoles cree que sus hijos no son conscientes de la importancia de ahorrar, y el 50% ni siquiera sabe de dónde procede el dinero que se gasta en su casa. Asimismo, la encuesta evaluó a través de cinco preguntas conocimientos importantes en el manejo del dinero. Menos de la mitad de los encuestados en todos los países respondieron correctamente al menos a cuatro o cinco preguntas.
Por países, en España sólo el 27% de los encuestados contestaron correctamente, frente al 37% de los turcos, el 33% de los italianos o el 31% de los belgas, los países más avanzados en esta prueba de competencia financiera. Estos resultados muestran que, en general, el nivel de conocimiento financiero en Europa es bajo. Entre los que respondieron correctamente se detectan algunas características comunes: son mayores de 25 años, trabajan a tiempo completo, no discuten con su pareja por temas de dinero, toman ellos mismos sus propias decisiones financieras y manejan su dinero con cuidado, revisando a fondo los extractos bancarios, las facturas de las tarjetas de crédito y otros documentos todos los meses