La letra pequeña de los préstamos
5 sustos
que puedes llevarte si no lees la letra pequeña de un préstamo
Firmar alegremente un
contrato de préstamo sin analizar las cláusulas que lo acompañan puede traernos
más de un susto. Comisiones desconocidas, vinculaciones excesivas, cuotas más
altas de lo esperado… Si tenemos pensado endeudarnos, vale la pena ser cautos y dedicarle al contrato el tiempo necesario
para comprender todos sus apartados. Desde el comparador especializado en
préstamos personales HelpMyCash.com señalan
que nunca deberíamos contratar un producto financiero sin entenderlo y sin
haber leído previamente el contrato con todas las condiciones del producto. De
hecho, no hacerlo puede traernos más de un disgusto.
1. Atención con el tipo de interés
Aunque la mayoría de los
préstamos tienen un tipo de interés fijo, lo que permite conocer los intereses
que se pagarán en cada cuota desde el primer momento, en ocasiones el préstamo puede estar referenciado a algún índice,
normalmente al euríbor, al que se le sumará un diferencial, es decir,
tendrá un tipo de interés variable.
Actualmente el índice
europeo cotiza en mínimos (-0,056 en julio). Si contratamos, por ejemplo, un
préstamo de 10.000 euros a cinco años referenciado al euríbor con un
diferencial del 5 %, acabaremos pagando una cuota mensual de 188,44 euros. Sin
embargo, si el euríbor se dispara en los próximos años y alcanza una cifra
superior a la actual, de por ejemplo un 3,5, entonces las cuotas se dispararían
a 205,17 euros.
2. El gasto inicial es mayor de lo esperado
El tipo de interés no es el
único punto al que debemos prestar atención. El apartado del contrato en el que
se especifican las comisiones es sumamente importante. Las comisiones de apertura y de estudio pueden suponer un desembolso
inicial considerable. Para un préstamo de 10.000 euros, una comisión de
apertura del 3 %, por ejemplo, supondría un gasto extra de 300 euros. Actualmente
es posible contratar préstamos sin comisiones
como el Crédito Proyecto de Cofidis (desde
el 5,06 % TAE y sin necesidad de cambiar de banco) o el Préstamo Personal de
Cetelem (desde el 7,18 % TAE).
3. Amortizar anticipadamente no siempre es gratis
A diferencia de lo que
muchos puedan pensar, anticipar el importe de un préstamo no siempre es gratis.
Muchas entidades aplican una comisión
sobre el capital amortizado. ¿La razón? Al devolverse anticipadamente una parte
del dinero, se reduce el capital pendiente, que es la base sobre la que se
calculan los intereses de las próximas cuotas y, por ende, se pagan menos
intereses. Lo ideal es contratar un préstamo que no aplique esta comisión, para
que cada vez que queramos podamos amortizar capital anticipadamente sin asumir
gastos extra.
4. Vinculación inesperada
Cuando la banca promociona
sus préstamos, suele centrar el foco de atención en el tipo de interés. Tenemos que averiguar también cuál es la
vinculación exigida. Salvo en contadas ocasiones, la mayoría de los bancos
nos pedirán la nómina y, en muchos casos, es probable que tengamos que
contratar también un seguro. Debemos averiguar su coste antes de darle el “sí
quiero” a la entidad y valorar si no saldría más a cuenta tener un interés
mayor, pero sin productos asociados.
5. El Importe adeudado es mayor de lo esperado
En ocasiones, las entidades
de crédito financian el importe de ciertas comisiones o las primas de los
seguros. Aunque a priori pueda
resultar una opción atractiva, ya que nos evita tener que pagar de golpe ese
extra, el importe del seguro y las
comisiones se sumarán al capital total adeudado sobre el cual se calcularán los
intereses, por lo que la deuda se encarecerá.
Pongamos un ejemplo: un
cliente solicita un préstamo de 1.000 euros a pagar en un año con un interés
del 7,5 %. En este caso, los intereses totales, que se calcularían sobre los
mil euros, acabarían siendo de 41,09 euros. Además, tiene una comisión de apertura
del 2 % y un seguro de prima única de 100 euros. Si le sumamos el coste de la comisión
(20 euros) y del seguro, el precio del préstamo sería de 161,09 euros.
Sin embargo, si el banco
incluye en el montante a deber el importe de la comisión y del seguro, los intereses finales aumentarían hasta los
46,02 euros, ya que se calcularían sobre una base de 1.120 euros. En este
caso, el coste total del préstamo sería de 166,06 euros.