Códigos pin más utilizados en las cuentas y tarjetas
La pereza hace peligrar el saldo de miles de tarjetas de crédito
El ser humano tiende a la
holgazanería. La pereza forma parte de nuestra naturaleza, hasta tal punto que
se ha adueñado de nuestras contraseñas. En un mundo cada vez más digital, la
mayoría de nosotros tenemos que memorizar un buen número de códigos. Abrir el
correo electrónico, desbloquear el móvil o la tableta, acceder a la banca virtual
o sacar dinero en un cajero automático son solo algunas de las operaciones que
requieren introducir una clave para poder ejecutarse. De ahí que muchos recurramos a la estrategia fácil de
repetir una misma contraseña para distintas operaciones o usemos
combinaciones muy sencillas para no tener que hacer grandes esfuerzos a la hora
de memorizarlas. Pero una contraseña fácil implica un riesgo mayor de ser hackeado. Y lo anterior se extiende
también a los códigos pines de las tarjetas.
Cuáles son los códigos pin más fáciles de piratear
DataGenetics hizo púbicos hace unos
años los resultados de una investigación en la que se habían analizado los
códigos pin de 3,4 millones de tarjetas de crédito. Las conclusiones sonrojarán
a más de uno: del total de tarjetas estudiadas, en el 27 % se repetían los mismos veinte códigos, con ejemplos como
1111, 0000 o 6969. Más
revelaciones: el 20 % de las tarjetas analizadas tenían una contraseña que
comenzaba por 19. La razón es fácil de adivinar: sus titulares utilizaban su
año de nacimiento.
Pero, salgamos de dudas, ¿cuál era el código pin más utilizado? Ni
más ni menos que 1234, ese era el pin
más popular y lo compartían alrededor del 11 % de las 3,4 millones de tarjetas.
El segundo más usado era 1111 (6 %
del total) y el tercero, 0000 (2 %).
Es decir, que alrededor del 19 % de los pines podían ser hackeados probando una de esas tres combinaciones.
Otros patrones son fácilmente
detectables como, por ejemplo, el clásico 2580, que coincide con los números
dispuestos de arriba a abajo en la columna central del teclado de los cajeros.
Las contraseñas más usadas en 2017
La vagancia se ha instalado también
en Internet. Según un estudio realizado por SplashData, 123456 y password continúan siendo dos de las contraseñas más usadas en
Estados Unidos y Europa, junto con otras casi igual de fáciles de hackear como iloveyou o qwerty (primeras
seis letras del teclado más común). En este caso la mejor estrategia, además de
no utilizar los mismos códigos en varios portales o soportes, es combinar números y letras mayúsculas y
minúsculas, además de evitar frases fácilmente detectables, fechas de
nacimiento, nombres propios, etc.
En cuanto a los códigos de los
plásticos, desde el comparador de tarjetas HelpMyCash.com
señalan que, lógicamente, lo primero es no recurrir a ninguno de los más
usados. También evitar, una vez más, fechas de nacimiento. Y, en este caso, no
abusar de patrones de teclado fácilmente detectables como, por ejemplo, el ya
citado 2580 u otros números situados
juntos.
Aunque no lo creamos, debido a que
el código pin de una tarjeta tiene solo cuatro dígitos y solo hay diez números
disponibles, las combinaciones posibles
son de 10.000. Según la investigación publicada en DataGenetics, el pin
menos recurrido era 8068.
Para añadir un extra de seguridad, nunca debemos llevar anotados los códigos
de las tarjetas junto a los plásticos. De hecho, la normativa actual limita
la responsabilidad del cliente en caso de uso fraudulento de sus tarjetas en
150 euros (una cifra que se reducirá a 50 euros este año cuando entre en vigor
la trasposición de la directiva europea 2015/2366). Sin embargo, la normativa también
señala que el usuario está obligado a ser diligente con sus códigos pin y si no
lo es, tendrá que soportar el total de las pérdidas.