Pagar con el móvil
Los últimos estudios sobre el uso del móvil apuntan
a que este dispositivo va a seguir cobrando importancia en un futuro próximo,
en muchos sentidos. Pero, sin duda, uno
de los campos en los que este protagonismo va a ser más evidente es dentro de la operativa bancaria.
Esta tendencia
se hace evidente en los resultados del análisis de Ferratum, una entidad
financiera especializada en créditos. Anualmente esta empresa elabora un
informe que, bajo el título de Barómetro
del Verano, analiza las relaciones entre clientes y entidades. Este año los
datos son especialmente sorprendentes. Todo apunta a que en estas vacaciones el
uso del teléfono para realizar
operaciones bancarias va a aumentar un
166 % respecto al verano anterior.
No es casualidad que esta cifra
coincida con el aumento de las conocidas
fintech. Estas empresas emergentes especializadas en combinar servicios
financieros con la última tecnología han casi triplicado su presencia en el
país. Concretamente, en solo los tres últimos años han aparecido 150 nuevas start-up con estas características, lo que supone un 160 % más respecto
al anterior trienio.
Aunque en
principio estas fintech se planteaban
como competencia de los bancos, algunos de estos las han incorporado en sus procesos de modernización. ¿El
resultado? Ahora mismo son muy pocas las operaciones que un cliente no puede
gestionar con el teléfono.
Escoger una ‘app’ entre la multitud, una de las tareas más complicadas
Los pagos móviles son una de estas nuevas opciones.
Por un lado, con ellos es posible realizar transferencias a contactos del teléfono
de forma inmediata. Por otro, permiten pagar
en establecimientos acercando el dispositivo al TPV (Terminal Punto de Venta).
En ambos casos el procedimiento es realmente sencillo y solamente requiere
instalar una aplicación específica en el móvil.
Sin embargo, a
pesar de la comodidad, los pagos con el
teléfono en España no despegan, aun siendo uno de los países con más
cantidad de smartphones por persona.
La falta de seguridad en estas nuevas
tecnologías parece ser la causa principal, o eso dicen el 62 % de
ciudadanos. Y es que según el último Informe Mobile Mundial de
Dintrendia, solamente el 12 % usa el móvil
para pagar sus compras. Una cifra muy
reducida si se compara con otros países europeos que presentan unas condiciones
tecnológicas similares a las españolas.
Pero la falta de
confianza no es la única explicación de por qué no triunfan estos pagos. La
falta de comercios adaptados y el requerimiento de un dispositivo con
tecnología NFC hacen que, en ocasiones, resulte imposible usar esta herramienta
para pagar.
Incluso para
aquellos que confían y disponen de las condiciones necesarias, escoger una aplicación con la que
emplear este método se complica. Cada
día surgen más apps similares que dificultan
el proceso de decidir cuál es realmente segura y útil para lo que el usuario
necesita.
Por eso, desde
el comparador de productos financieros
HelpMyCash han querido proponer una solución para que los usuarios no
desaprovechen un servicio que está triunfando mundialmente. Han lanzado una guía gratuita titulada ¿Qué opciones existen para pagar con elmóvil? con la que es posible
escoger rápidamente la aplicación más competente según las
necesidades de cada cliente.
La comodidad y la seguridad, los puntos fuertes de los pagos móviles
Y es que las
funcionalidades de estas nuevas aplicaciones son sorprendentes y variadas. Desde
pagar facturas leyendo el código QR hasta organizar botes de amigos en Facebook
en el que cada uno paga su parte o enviar dinero a alguien que vive en la otra
parte del mundo sin tener que preocuparse del cambio de divisa.
Estas opciones
que diferentes apps ofrecen y que
quedan detalladas en el manual se basan en dos beneficios principales: más comodidad y, a diferencia de lo que
muchos clientes piensan, mayor
protección de datos.
Una aplicación
adecuada y segura puede ser mucho más útil en caso de pérdida del móvil. Por ejemplo,
es posible bloquear el wallet y que
nadie acceda a la información, de una forma más sencilla que con las propias
tarjetas de crédito.
La clave para
sacarle el máximo rendimiento a estos nuevos medios es saber escoger la mejor app
en cada momento. Con una buena elección ya no queda tan lejos el día en el que
la cartera se pueda quedar en casa.