Pueden cambiar las cuotas de una hipoteca fija
¡Cuidado! Las cuotas de una hipoteca
fija también pueden cambiar
La seguridad de pagar siempre lo mismo es el principal
argumento a favor de los préstamos hipotecarios a tipo fijo, cuyo interés se
mantiene, en principio, constante a lo largo de todo el plazo. Sin embargo, desde el comparador de hipotecas
HelpMyCash.com afirman que las
mensualidades de estos productos también pueden sufrir modificaciones,
puesto que las entidades revisan su interés regularmente para asegurarse de que
se cumplen los requisitos de vinculación pertinentes.
El interés puede subir hasta en 1,5
puntos
Como ocurre con las hipotecas variables y mixtas, para
conseguir un interés fijo atractivo es necesario cumplir varios requisitos de
vinculación, en la mayoría de los casos: domiciliar la
nómina, firmar diversos seguros, etc. Al reunir estas condiciones, el tipo aplicado sobre las hipotecas fijas
se reduce una media de 1,08 puntos porcentuales, pero esta rebaja no es
permanente.
Periódicamente, por lo general una vez al año, la entidad
comprueba si el cliente todavía reúne todas las condiciones que le permitieron
acceder a la bonificación máxima. De no
ser así, el interés se incrementa automáticamente hasta la siguiente revisión,
pudiendo aumentar hasta en un máximo de 1,5 puntos porcentuales dependiendo del
banco. Por tanto, la cuota de la hipoteca (que en un principio tenía que ser
siempre la misma) se encarece.
Veámoslo con un ejemplo práctico. Imaginemos que contratamos
una hipoteca fija de 100.000 euros a 20 años con un interés del 2 % bonificado
en un punto porcentual. En este caso, la cuota que pagaríamos sería de 505,88
euros. Sin embargo, si dejáramos de cumplir las condiciones de vinculación
requeridas, las mensualidades posteriores a la fecha de revisión serían de
552,28 euros, puesto que el interés aplicado aumentaría hasta el 3 %.
Entre tres y cinco productos
vinculados
Por tanto, si queremos que la cuota de la hipoteca fija se
mantenga siempre sin cambios, tendremos que cumplir los requisitos de
vinculación año tras año. Por norma general, los bancos nos exigirán que contratemos entre tres y cinco servicios:
domiciliar los ingresos, firmar un seguro de vida y otro de hogar y, en muchas
ocasiones, suscribir uno o dos productos adicionales (una tarjeta de crédito,
un plan de pensiones, etc.).
En cambio, si
preferimos no atarnos al banco, nuestras opciones de conseguir un interés
competitivo serán más reducidas. En este caso, podemos acudir a entidades
como Openbank o Bankia, que solo exigen domiciliar la nómina para acceder al
menor tipo aplicado (del 2 % y del 2,25 % a 20 años respectivamente). Otra
posibilidad es pedir el préstamo a Hipotecas.com, una entidad online que ofrece
una hipoteca fija al 2,80 % a 20 años que se puede contratar sin tener que
cumplir ni un solo requisito de vinculación.
Con todo, las hipotecas a tipo fijo siguen siendo una opción
más segura que los préstamos variables, pues estos últimos están referenciados
a un índice que cambia diariamente y cuyo interés, además, también está
condicionado al cumplimiento de ciertos requisitos de vinculación. Pero desde
el comparador HelpMyCash.com avisan que, pese a tener firmada una hipoteca
fija, no estaremos a salvo de los cambios en las cuotas, así que conviene tener claro cuánto podría subir el
tipo aplicado en el caso de no reunir todas las condiciones
necesarias.