Préstamos personales para vacaciones veraniegas
¿Cuál
es el mejor crédito para las vacaciones veraniegas? Los españoles
optamos por los préstamos personales
Unos 1.650 euros por barba es lo que nos dejamos de media los
españoles en nuestras vacaciones de verano. Es uno de los datos que
arroja una estadística del portal Statista, la cual ve la luz en
estas fechas en las que el tráfico de personas por tierra, mar y
aire se multiplica en busca del descanso en esta época estival. Por
otro lado, aunque esta cifra es inferior a la que destinamos durante
los tres años anteriores, sigue siendo elevada y son muchos los que
optan por financiar la totalidad del descanso o algunas partes del
mismo con préstamos
de varios tipos. Pero, ¿qué productos financieros son
los que más nos gustan a los españoles para nuestras vacaciones
veraniegas?
Los
préstamos personales son la primera opción para los gastos del
verano
Aunque seamos
previsores y, como la mayoría de gente, reservemos transportes,
hoteles y otras actividades con varias semanas de antelación, el
número de españoles que recurre a productos de financiación es
elevado. No obstante, ¿qué tipos de préstamos son los que
preferimos para pagar los gastos en esta época estival?
Lo cierto es que
todo depende del gasto que queramos financiar. Según estudio de la
financiera Ferratum publicado recientemente, el 64 % de los
españoles optamos por contratar préstamos personales,
convirtiéndose esta clase de créditos en nuestra opción
prioritaria. No obstante, estos préstamos los empleamos para los
gastos más cuantiosos como son los vuelos o los hoteles, que suelen
exigir a nuestras carteras mayores esfuerzos.
Las
tarjetas de crédito son recurso para gastos más pequeños
El importe de los
préstamos personales nos permite disponer de mayores cantidades de
dinero que solemos destinar a los gastos más elevados de nuestras
vacaciones, como son el hotel y el transporte. Sin embargo, la
utilidad de las tarjetas de crédito también es empleada para otro
tipo de costes propios del descanso veraniego, como son las comidas y
cenas que hagamos fuera o, los regalos, recuerdos y otras compras
que hagamos en nuestro destino.
La inmediatez de
estos plásticos nos permite hacer frente a pagos de nuestras
vacaciones de forma inmediata, aunque también debemos saber que este
tipo de créditos son productos con intereses más elevados que los
de los préstamos personales con la finalidad de financiar vacaciones
veraniegas. Mientras que podemos conseguir créditos con intereses
en torno al 8 % TAE, las tarjetas con pago aplazado suelen oscilar
entre el 12 y el 25 % TAE.
¿Y
el papel de los créditos rápidos en nuestras vacaciones?
Tanto los
plásticos como los préstamos personales convencionales que ofrecen
tanto los bancos como algunas entidades financieras de crédito
siguen siendo las dos opciones tradicionales para financiar nuestras
vacaciones. Sin embargo, el mercado actual ofrece otras salidas y una
de las más socorridas es optar, como hacen muchísimos españoles
por los créditos rápidos de capital privado, popularmente conocidos
como minicréditos.
Su principal arma
comercial es que nos permiten conseguir bajos importes en menos de
quince minutos, aunque sus cortos plazos y sus altos honorarios hacen
que no sean la mejor solución para hacer frente al coste de nuestros
viajes veraniegos. Aun así, no debemos descartarlos definitivamente
ya que pueden ser la mejor solución si necesitamos liquidez
inmediata y de urgencia para algún gasto del viaje. Por ejemplo, no
dejar escapar una oferta de vuelo online o un hotel con una promoción
a punto de concluir. Además, la competencia del sector es tan
feroz que nos permite contratar varios de estos créditos rápidos
con promociones e, incluso al 0 % TAE.