Alianzas bancos y empresas fintech
Los bancos y las empresas ‘fintech’, ¿a un paso de aproximar
posturas?
Desde hace unos días, el Banco Central Europeo (BCE) insiste en que el
sector bancario del viejo continente está conformado por demasiadas entidades
financieras. Según las últimas declaraciones realizadas por Mario Draghi,
presidente del BCE, la abundancia de entidades bancarias podría ser la
principal causa de la disminución de los tipos de interés, la intervención de
los bancos centrales, la falta de diferenciación entre las diversas entidades
de crédito que conforman el sistema financiero europeo y, en última instancia,
la consolidación de las empresas fintech
como modelo de competencia directa de los bancos.
Encuentra las 7 diferencias, si es que las hay
A día de hoy, y según los expertos financieros del comparador onlineHelpMyCash.com, cada vez
resulta más complicado diferenciar un banco de otro, puesto que todos ellos
ofrecen un catálogo de productos y servicios financieros muy similar,
independientemente de que estemos hablando de un depósito bancario, una
hipoteca o, incluso, un préstamo. Por este motivo, son muchos los bancos que han querido apostar por la transformación digital, con la intención de marcar
un punto de inflexión entre ellos. Sin embargo, el resultado no ha sido el
deseado.
Si bien es cierto que la progresiva transformación digital del sector
financiero a la que se han visto sometidos los bancos durante estos últimos
años ha servido para que éstos renovaran su imagen, así como para que las
entidades bancarias favorecieran el uso de las nuevas tecnologías entre sus
clientes a la hora de gestionar las finanzas personales y profesionales, los
productos y los servicios ofertados siguen siendo en esencia los mismos que
antes de que tuviera lugar esta revolución tecnológica. La única diferencia
la encontramos en que ahora precisamos de un dispositivo tecnológico para poder
realizar las mismas operaciones bancarias que antes llevábamos a cabo desde la
oficina o la ventanilla.
Es en plena crisis de identidad de los bancos, cuando las empresas fintech han aprovechado para hacer acto
de presencia en el actual sistema económico. Estas empresas tecno-financieras
han ido consolidándose paulatinamente como una fórmula alternativa a la banca
tradicional. Todo ello, gracias a una amplia gama de servicios
especializados que han hecho posible la oferta de unas soluciones más
personalizadas para cada uno de los usuarios.
¿Veremos alianzas entre bancos y start-up financieras en un futuro próximo?
Según el informe The Future-Proof Digital Bank que recientemente ha publicado la
consultora IDC y que ha contado con el patrocinio de la compañía informática
SAP, a una de cada tres entidades bancarias (34 %) no le importaría colaborar
con alguna start-up del sector financiero. Asimismo, uno de cada cuatro bancos (25 %) estaría
dispuesto a contemplar la posibilidad de llevar a cabo una fusión con
alguna empresa fintech. Estas son algunas de las
conclusiones que se han podido extraer de este estudio, el cual se ha llevado a
cabo a partir de los resultados obtenidos de unas encuestas realizadas a 265
entidades de la banca minorista acerca de cómo impulsar la transformación
digital en el sector financiero global.
Este mismo informe deja entrever que la tensa y competitiva relación que
actualmente se establece entre los bancos y las empresas fintech podría experimentar un giro de 180 grados en un futuro
no muy lejano, puesto que “ambos tienen algo que el otro desea”, afirma Rob
Hetherington, responsable global de Servicios Financieros de SAP.
Mientras que los bancos se encuentran inmersos en
pleno proceso de transformación digital, tratando de proporcionar un valor
añadido a su relación con los clientes mediante la oferta de nuevos productos y
servicios; las empresas fintech tienen un talento innato para
innovar tecnológicamente y, además, se caracterizan por haber sido creadas con
el propósito de satisfacer sólo y exclusivamente al usuario. Ahora bien,
las start-up financieras carecen de un sistema de regulación tan
estricto y, por tanto, de la confianza de algunos usuarios, algo que sí tienen
los bancos.